El legado de Vargas Llosa sigue vivo en su obra, sus ideas y su valentía
La despedida de un grande: quién fue, qué hizo y por qué importa
Mario Vargas Llosa, el escritor peruano que revolucionó la literatura en español, falleció este domingo 13 de abril en Lima, a los 89 años, rodeado de su familia y en paz. Así lo confirmó su hijo Álvaro Vargas Llosa mediante una publicación en la red social X (antes Twitter). La familia informó que no habrá ceremonia pública y que sus restos serán incinerados, en conformidad con su voluntad. El legado de Vargas Llosa, sin embargo, trasciende su partida física y sigue vivo en millones de lectores en todo el mundo.
Con profundo dolor, hacemos público que nuestro padre, Mario Vargas Llosa, ha fallecido hoy en Lima, rodeado de su familia y en paz. @morganavll pic.twitter.com/mkFEanxEjA
— Álvaro Vargas Llosa (@AlvaroVargasLl) April 14, 2025
Obras que construyeron el legado de Vargas Llosa
El legado de Vargas Llosa comenzó a forjarse en la década de los 60 con novelas como La ciudad y los perros, La casa verde y Conversación en La Catedral, que sacudieron la narrativa latinoamericana. Desde entonces, su pluma no descansó: incursionó con éxito en el ensayo, el periodismo, el teatro y la crónica. Otras obras como La guerra del fin del mundo, La fiesta del Chivo o El sueño del celta lo consagraron como uno de los narradores más influyentes del siglo XX.
Según Infobae, “llegó a lo más alto de la literatura” no solo por los premios recibidos —como el Nobel de Literatura en 2010, el Cervantes en 1994 o el Príncipe de Asturias en 1986— sino por “la gran obra que construyó durante 65 años de escritura y publicación”.
Más que un escritor: un pensador sin filtros
El legado de Vargas Llosa no se limita a su bibliografía. También fue una voz política, un agitador de ideas. En su juventud militó en el comunismo, pero en su adultez abrazó el liberalismo, defendiendo sin ambigüedades la democracia, el libre mercado y la libertad de expresión. Fue candidato presidencial en Perú en 1990 y se mantuvo activo hasta sus últimos días como columnista, conferencista y presidente de la Cátedra Vargas Llosa.
En una entrevista recogida por Infobae, el escritor Sergio Ramírez afirmó que Vargas Llosa era “un liberal a ultranza”, comprometido con sus ideas, aunque estas incomodaran: “Nunca calla lo que piensa”.
Un legado que trasciende fronteras y generaciones
El impacto global del legado de Vargas Llosa se refleja en reconocimientos como su ingreso a la Academia Francesa (2021), siendo el primer miembro que no ha escrito en francés. También fue nombrado marqués por el rey Juan Carlos I de España en 2011. Más allá de los títulos, su pensamiento cruzó fronteras y generaciones. Fue leído, discutido y respetado por su coherencia intelectual.
Aunque su despedida no será pública, su obra seguirá presente en bibliotecas, aulas, ferias del libro y debates. Vargas Llosa no fue solo un novelista; fue un constructor de sentido, un observador agudo de América Latina y del alma humana.
En palabras de su familia: “Deja detrás suyo una obra que lo sobrevivirá”.